A todos los seguidores de mi burro y sus hazañas,
Tengo una buena noticia y también tengo una mala,
Mi burro se me murió lo menos que yo esperaba,
Mi papa me lo mato con una tremenda carga,
Con sietes sacos de maíz cuatro sacos de tapirama
Cierto que lo llevo al sitio donde mi padre lo arreaba,
Cuando le soltó la silla y la cincha le aflojaba,
Pego tremendo gemido y la sangre vomitaba.
Y la sangre vomitaba,
Lo lleve a un veterinario a ver si me lo salvaba
Pero enseguida me dijo tiene la hiel reventada,
El hígado desprendio y las costillas quebradas,
Hay dije bendito dios mire usted que buena vaina
Que si no fuera mi papa por dios que se la cobraba,
Porque el tenia que saber que no era un camión de carga
El consuelo que me queda que un pollino me dejaba,
El es un negrito tinto con una mancha en la cara
A mi hermano se lo di para que me lo amansara,
Ese burro daba miedo de tanto que corcoveaba,
Unos cuatro metros de alto el burro se levantaba
Con tremendo barajuste por la costa de una cañada,
Después que me lo amanso el pollino arrendaba.
Cuando pasamos por Apure en Mantecal lo miraban,
Por el Chano y San Fernando y el burro hasta coqueteaba
Y la televisión y la prensa publicaban,
Ernesto tenía otro burro que al viejo lo superaba.
El nacimiento de mi burro tengo la fecha anotada,
El nació un cuatro de agosto a la una de la madrugada
Por cierto allá en el Caribe cerquita de mata de palma,
Por la mata de las paredes el también se la pasaba,
Por el Tábano y el rastro por Yupito y Santa Clara
Estuvo en la Juverita y las vacas visitaba,
Por el rumbo de Caimancito de vez e cuando pasaba,
En la tierra de los Guerreros por Lechemiel lo miraban.
Por Lechemiel lo miraban,
En la costa del Caribe una sorpresa se llevaba
Hay se encontró con un tigre que le tendió una emboscada,
Y fue como mi burro hizo su primera hazaña,
El tigre le voló encima se hecho tremenda arrastrada
Los sesos se los saco de una tremenda patada,
Llegando a Caribe Rojo los indios me lo atacaban,
A flechazo y a lanceta creí que me lo mataban,
Entre pata y mal herido a todos los derribaba.
Hay yo dije tengo un burro que me cuida las espaldas,
Que me acompaña por siempre por donde quiero que vaya,
El burro estaba herido y ya se recuperaba,
Me demostró su lealtad soltando una rebuznada.