Hablando: A, No señor…hágame un fa…
Hágame un favor que quiero agradecerle,
señor taxista pero que sea prontito
quiero estrechar,
quiero estrecharla por fin entre mis brazos
llévame ahora señor se lo suplico.
Si la mirar
ame daría la razón,
por ella mi corazón
esta rejuvenecido.
Me reconforta
la esperanza de saber,
que ella será la mujer
que cambiará mi destino
ya no seré un peregrino,
sin alba ni atardecer
en mi cielo entristecido
habrá un nuevo amanecerlos jardines del cariño
volverán a florecer,
y pasarán al olvido
los fracasos del ayer.
Hablando: A, que pasó…hágame un fa…
Hágame un favor de todo corazón,
señor arpista mi pecho se lo pide
es la verdad es la verdadera historia de mi vida
hoy me confieso ante su amor sublime.
Con su presencia
que subyuga y enternece,
siento que mi pasión crece
soñando en mi fantasía.
Sueño divino
del que no despertaré,
siempre soñando estaré
por toda la vida mía,
ella será mi alegría
mi dicha esperanza y fe
mi canción mi melodía
la que siempre cantaré,
por nombre que le pondría
aunque nunca lo diré.
Podría llamarse Maria
y porqué no Su Merced. (BIS)