Negrita de mis antojos de lindos ojos vámonos pa mi llanura decídete de una vez ay mi amorcito y súbete a mi montura que nos vamos paso a paso bajo la luz de la luna, tu en la silla yo el anca abrazando tu cintura, pa cobijarte del frió brindándote mi ternura y cantándote al oído para alojar tu hermosura, al paso de mi caballo de mi castaño iras cómoda y segura te susurrare un te quiero puro y sincero, como el llano y sus anchuras la briza te hará caricias en tu bella encejadura, y las estrellas del cielo adornaran tu figura mis melodías sabaneras alegraran la aventura pa defenderte llevo mi cuchillo cacha dura.
Vamonos que se hace tarde y tus padres pueden escuchar la bulla, no tengas miedo mi amor que nos proteje el señor de las alturas y es que un amor como el nuestro sincero y sin atadura merece que el dios supremo nos resguarde en su envoltura yo te daré libremente un amor sin atadura ninguno como te quiero como me quieres ninguna.
Cuando lleguemos al rancho mi lindo encanto tendrás toda una fortuna en paisaje sabanero en aperos vestías y coplas montunas, una tinaja en el patio un fogón y una totuma un perro de compañero el corral y la laguna una buena campechana de una novilla lebruna un botalón donde pegues toditas tus amarguras.
Pa que te puedas bañar un morichal de agua cristalina y pura, y no conforme con eso voy a obsequiarte una potranca sebruna pa que salgas en las tardes a contemplar la lejura disfrutando de el aroma que la sabana perfuma, te deleitaran las aves con mis melodías agudas regalándote un concierto típico de mi llanura.
Por comida no hay problema tengo un conuco con muy buena agricultura, las vacas nos dan el queso y balde lleno de leche fresca y espuma orgullosos estaremos al mirar nuestras criaturas inocentes jugueteando con gritos y travesuras no tengo para ofrecerte mas que el llano y su escultura y un corazon sabanero que cuando te veo se apura.