I
Yo les quiero decir algo que es la pura verdaita,
A las mujeres casadas que ven las cosas distintas,
La que no aprieta a su esposo se puede quedar solita,
Si cualquier hombre se pierde, con tanta mujer bonita,
Gracias Dios que el mío cuenta con una linda casita,
Y bajo su mismo techo, tiene lo que necesita,
Desayuno, almuerzo y cena, y al ropa planchadita,
Un cuarto con buena cama y una mujer jovencita,
Desde que vive con migo, no ha tenido más conquista,
Y que estoy bien vendía, que nunca lo pierdo de vista,
No se me va del potrero, todo el tiempo esta cerquita,
Porque yo siempre le tengo, la manea bien cortica.
II
Yo no sé cómo hay esposos en estos tiempos de ahorita,
Que se calan una guaima peliona y materialista,
Yo no estoy dando casquillo, yo lo que soy es realista,
Con el hombre hay que portarse cariñosa y derechita,
Por hay muchas mujeres que viven tirando pinta,
Se van solas pala calle y se echan sus cervecitas,
Si el marido les reclama, lo maltratan y lo gritan,
Y hoy día quien se la cale es porque es bien masoquista,
Yo por eso al mío lo trato con la mano suavecita,
Aunque la gente me diga que él es un oportunista,
Poro a mi lo que me importa es que duermo tranquilita,
Lo tengo cuando yo quiera y amanezco livianita.