La música llanera tiene una forma única de capturar la esencia de los paisajes, las emociones y las raíces culturales del llano. “Cielo Azul, Palma y Camino”, interpretada por el talentoso Jorge Guerrero, es un claro ejemplo de esta riqueza musical.
Con una letra cargada de imágenes nostálgicas, Guerrero nos transporta al corazón del llano:
«Con el sol a medio techo, por la uverita pasé…»
A través de su interpretación, se revive el sentimiento de conexión con la tierra y los recuerdos que surgen al recorrerla, entre palmas, caminos y chaparrales. Cada verso refleja un profundo amor por la sabana y un reconocimiento al tiempo que ha pasado, pero que nunca se olvida.
Letra de Cielo azul, palma y camino
De leche miel a caballo
Salí con la madrugada
Con el primer canto gallo
Que venía de una enrama´a
Un olorcito a café
Que acababan de colar
Me persigné y me monté
Silbando en la empaliza´a.
BIS
La brisa de la sabana
Helaba la inmensidad
Y antes de la resolana
Esa mañana se me fue solo en pensar,
En una linda elorzana
Que tenía que visitar.
Cielo azul, palma y camino
Horizonte y soledad
Ese ambiente matutino
Le puso el trino
A mi voz para cantar
Un pasaje relancino
Sabroso pa cabalgar.
Con el sol a medio techo
Por la Huverita pasé
En mate palma derecho
No me pude detener
Porque un tropel de recuerdos
Me hicieron descomponer
El alma, pecho y cerebro
Por el tiempo que se fue.
Sabanas de Chaparral
Cuántas veces te crucé
La Guaira, El Alcornocal,
En el umbral de Elorza al oscurecer
Venía buscando un lugar
Para saciarme la sed.
Esa noche a mi elorzana
Con el alma le canté
Mis coplas de la sabana
En su ventana y entre besos le juré
Me voy, pero en dos semanas
A buscarte volveré.
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